Durante la reunión de carácter electoral, que se estaba celebrando en la sede del partido en Alcantarilla, los afiliados y dirigentes que allí se encontraban se vieron trágicamente sorprendidos por la noticia del crimen. Inmediatamente, por parte del presidente local, Lázaro Mellado, se propuso guardar un minuto de silencio, así como suspender cualquier acto de campaña hasta nueva orden. Todos los asistentes a la reunión se han visto muy afectados, ya que no se esperaba una noticia de esta naturaleza, sobre todo después de haber empezado a superar los asesinatos de militantes populares que habían venido sufriendo en sus filas años atrás por parte de ETA.
Todos los afiliados se solidarizan con la familia de Isabel Carrasco y muestran su más contundente repulsa por lo sucedido. Se ha remitido un telegrama de condolencia a la dirección del Partido Popular en Castilla-León.