La delegación de UPyD en Alcantarilla exige al equipo de gobierno que solucione definitivamente los problemas que afectan de manera cada vez más grave a los usuarios y trabajadores de la residencia de ancianos Nuestra Señora de la Salud de Alcantarilla.
Desde hace tiempo, familiares de usuarios de la residencia nos están haciendo llegar quejas que aluden al reiterado mal funcionamiento de los servicios que se prestan en la citada. Son muy habituales, por desgracia, deficiencias importantes en mobiliario (colchones en mal estado) carencia de productos de aseo (esponjas) y ausencia de lencería básica (empapadores, sábanas). También hemos recibido quejas sobre las continuas averías de la grúa elevadora y otros electrodomésticos del centro. Pero sobre todo y lo más importante, queremos poner en énfasis la falta de atención adecuada que reciben los mayores debido a la falta de personal.
Respecto a la situación de los trabajadores, la falta de personal provoca que no se puedan realizar los cuidados básicos que precisan los ancianos en algunos momentos del día. Sólo la disposición y coordinación de los trabajadores del centro posibilita que exista una atención continuada durante las jornadas, ya que la dirección del centro y la empresa que lo gestiona, SERGESA, no ha demostrado capacidad y eficacia suficiente para solventar los problemas, por lo que se producen periodos de desasistencia de los mayores residentes.
La formación magenta recuerda que el Ayuntamiento y la concejala de servicios sociales, Salud Hernández Aulló, son los principales y últimos responsables de la gestión y buen funcionamiento de la residencia, así como de los servicios que allí se prestan.
Hace un año, Concepción De Béjar, portavoz de los familiares, ya expuso todas estas deficiencias ante el Pleno del Ayuntamiento, pero los problemas no solo siguen sin estar solucionados sino que se han agravado con nuevas deficiencias que perjudican e influyen negativamente en los cuidados de los residentes
Desde Unión, Progreso y Democracia creemos que se debe garantizar una atención y cuidado digno y suficiente de los mayores y eso debe ser una prioridad de las Administraciones, por lo que es esencial disponer de partidas presupuestarias suficientes para este fin.