El Ayuntamiento de Alcantarilla celebró hoy el homenaje a los funcionarios jubilados, empleados municipales ejemplares y a los miembros de la Policía Local, coincidiendo con la festividad del Beato Andrés Hibernón, que cumple 75 años como patrón del Ayuntamiento y la Policía Local de Alcantarilla.
Por ese motivo, tras la tradicional ofrenda floral al Beato Andrés Hibernón en la iglesia de San Pedro, la Hermandad entregó al Ayuntamiento una imagen del Beato, que está instalada en la escalinata principal del Consistorio, junto al escudo de España.
En el Centro Cultural Infanta Elena se celebró la entrega de reconocimientos a los funcionarios jubilados en el último año por sus años de entrega, esfuerzo y dedicación en su vida profesional. A ellos se suma el reconocimiento especial a título póstumo a José Marqués, subinspector de Policía Local de Alcantarilla, que también recibió la Cruz de Oro a la Constancia, tras haber dedicado más de 35 años de servicio al Cuerpo de Policía Local en el municipio.
Otro reconocimiento especial lo recibieron Antonio Franco, funcionario en activo destacado por su esfuerzo y dedicación en el desempeño de sus funciones, y la Asociación de Familiares y Enfermos de Alzhéimer y otras demencias (AFADE), que este año cumple el 25 aniversario de su fundación.
El alcalde, Joaquín Buendía, señaló que "el 18 de abril es un día muy especial y entrañable para todo el personal del Ayuntamiento, porque es el día en el que podemos mostrar nuestro reconocimiento, junto con nuestro agradecimiento, a las personas que desarrollan su trabajo de manera sobresaliente y también el agradecimiento a los empleados que han dedicado su vida laboral al servicio público en Alcantarilla, así como a los miembros destacados del Cuerpo de Policía".
También recibieron sus condecoraciones los miembros de la Policía Local que han cumplido 20 años de servicio, con la Cruz de plata a la Constancia a la subinspectora Inmaculada Jiménez y los agentes Francesc Legaz, Lorena Franco y Juan Antonio Ferrer. Los agentes Raúl Marín y Cristóbal Navarrete recibieron la Cruz de oro a la Constancia, por sus 35 años de servicio, junto con el subinspector José Marqués, que la recibe a título póstumo y la recogen en su nombre su mujer y sus hijos.